viernes, 13 de junio de 2014

Un cambio de aire para seguir avanzando

En el afán por demostrar el papel de las empresas transnacionales en la economía mundial, se ha insistido sobre la conexión y concentración  entre las corporaciones  dominantes. Es interesante por lo tanto, recurrir a uno de los  estudios sobre el tema. 
A finales del año 2011, un análisis  de la Escuela Politécnica Federal de Zurich, “The network of  global corporate control”, sacudió el debate sobre la concentración del poder a nivel mundial. 1-La investigación permitió demostrar que 1318 transnacionales poseían directa o indirectamente acciones de sociedades que representaban el 60% de los ingresos mundiales, con un  núcleo central  compuesto  por  147 compañías,   concentrando  el 40% de los ingresos corporativos a nivel planetario.

A pesar de ser análisis no concluidos  por realizarse en base a  datos   no siempre de fácil acceso,  surgen dos elementos básicos a tener presentes - A) el nivel de conectividad entre las grandes firmas - B) el nivel de concentración, descubriendo la tenencia del  80% de las acciones de esa red  en manos del 0.6 % de los accionistas. En definitiva, cuando mas cerca se esta del  centro de la estructura, más aumenta la concentración. Dichos   niveles  ligados  al sector industrial y al negocio mediático,  incidiendo directamente en este último,  ponen  en peligro el concepto mismo de democracia (burguesa).

 Situación  engendrada  dentro  de un todo único, no  ajena al  proceso de formación de Estados Unidos, y,  al  eje central de su  política exterior y seguridad  “el uso de la fuerza”. Su  puesta en práctica le permitió en la primera mitad del siglo XIX   arrebatarle  a México más de la mitad de su territorio,  en cumplimento de  los  planes  expansivos al sur y oeste de las  fronteras originales. Posteriormente,  al término de la guerra civil (1860 – 1865) abordan  una etapa de rápido desarrollo capitalista,  acelerando la transición hacia la fase imperialista, caracterizada por la aparición de los monopolios,  hegemonía financiera sobre los demás sectores,  rivalidad por la captación de mercados de capitales y  materias primas.
En el mencionado  contexto, las dos ultimas décadas del siglo XIX fueron signadas por la concentración del capital Norteamericano y su paso de la industria a las finanzas, fundamento del imperialismo moderno - a partir de ello, las elites políticas apuntaladas por el gran capital, desataron la guerra imperialista  Hispano Cubana – Norteamericana del año 1898. De ahí en mas, movidos por intereses geopolíticos y geoestratégicos, participaron  en la primer guerra mundial (1914 – 1918) y en la segunda (1939 -1945).  Dicho accionar le permitió convertirse  en el primer proveedor de materias primas,  productos alimenticios y  en  el principal acreedor del mundo.
Supo aprovechar al máximo su territorio continental intacto, a pesar de haber participado en la segunda conflagración  mundial, orientando los  beneficios a las grandes corporaciones, reduciendo el desempleo, saliendo airoso de la gran depresión,   y acumulando el 80% de las reservas globales  de oro,  convertirtiendose  en la primer potencia económica a partir del  año 1944,  acuerdos de Bretón Woods de por medio y  el privilegio de emitir dólares como moneda internacional de cambio.

El  lugar y  papel de Estados  Unidos, fue definido  en la segunda guerra mundial por  la existencia de una correlación de fuerzas internacional establecida en la guerra fría, cuando  las conexiones  del aparato político militar  y las corporaciones monopolicas productoras de armas, adquirieron un auge sin precedentes, fortaleciendo  el “complejo militar industrial”. A lo largo de esa etapa concluida en el siglo XX  en el periodo pos guerra fría,  el uso de la fuerza adquiere el papel central  en  las administraciones Estadounidenses.

El  anuario del año 2013 presentado por el  instituto de investigación de la paz de Estocolmo, revelo  datos importantes relacionados al tema, publicitando los montos  de   las ventas de armas y servicios militares a nivel planetario  por  las 100 mayores corporaciones,  alcanzando en el año 2011 los  465570 millones de dólares, frente a los 411000 del año anterior, desde el año 2002 con  las ocupaciones de Afganistán e Irak, se  incrementaron en un 60%.  La conclusión es una sola, mientras más guerras existan, mas armas se necesitan,  por lo tanto más dinero se le suministra al “complejo militar industrial” transformado en una especie de estado supranacional, desarrollando políticas en lo fundamental inhumanas.
Según informaciones aparecidas en el diario Granma del 20/9/2013, de las 10 corporaciones mundiales ganando mas dinero  en el segmento económico citado,   siete son  de Estados Unidos: Lockheed Martin, Boeing, General Dynamics, Raitheon, Northrop Grummn, L3 Communications, United Technologies. Se le suman Bae Systems (Reino Unido) Eads (Union Europea) y Finmeccanica (Italia).

Nuestra región cobijando  elementos  unificadores  comunes, surgidos por el nacimiento de  los países  como estado nación modernos, luego de tres siglos de dominación Europea (Española  y Portuguesa) y  la integración de  los pueblos originarios a los nuevos estados, por parte de las oligarquías vernáculas,  de modo forzoso – sufriendo  luego  la intervención Inglesa, fue configurando a través del tiempo  la violencia estructural como matriz común.  Profundizándose en la actualidad  por ser parte importante del  tablero intervencionista Norteamericano  2- así lo demuestran los informes presentados por tres influyentes centros  de investigación y análisis de dicho país, especializados en los estudios sobre el hemisferio occidental – Centro para las políticas internacionales (CIP) – grupo de trabajo para asuntos Latinoamericanos  (LAWCEF) y la oficina de Washington para asuntos Latinoamericanos (WOLA) revelando las orientaciones del  gobierno Estadounidense  de emplear  las  fuerzas de operaciones especiales, como garantías de la   “seguridad” regional” pregonada.
Las avanzadas son  destinadas  para tareas de capacitación, recaudación de inteligencia y otras misiones militares, bajo la orbita del viejo esquema de la lucha antidrogas. Los objetivos   van más allá del mero entrenamiento, permiten  la familiarización de las unidades con el terreno, la cultura y  sectores claves de las fuerzas de seguridad en países donde algún día podrían operar.

Estados Unidos mantiene alrededor de 13 mil elementos de sus fuerzas de operaciones especiales (FOE) desplegadas en 75 países,  integradas por unidades de elites del ejército, infantería de marina, fuerza aérea, expertos en operaciones de guerras psicológicas, actividades clandestinas y encubiertas, acciones desestabilizadoras, sabotajes, espionaje, ataques con drones, ataques cibernéticos y asesinatos selectivos, operando bajo las órdenes del comando de operaciones especiales conjuntas del Pentágono, cuyo cuartel central se encuentra en Mac Hill, estado de Florida.
 En el nuevo plan  denominado visión 2020, implementan   un enfoque multiagencias, no únicamente militar  poniendo en práctica la integración de las comunidades multinacionales, intergubernamentales e interagencias.

En el entorno citado, mientras un puñado de empresas ganan  sumas  siderales,  las grandes mayorías sufren las consecuencias de las  desigualdades crecientes, evidenciándose en   la  situación de América Latina y el Caribe  con  109 millones de jóvenes entre 15 y 24 años de edad, dentro de una población de 617 millones de habitantes, viviendo en 22 países del subcontinente,  pasando por  situaciones calamitosas.  La organización internacional del trabajo (OIT) señalo que el 40% de la población juvenil no trabaja, el 20% no estudia ni trabaja, más de 16 millones tienen ocupaciones precarias y 7 millones tienen actividades como independientes, complementadas con las opiniones del fondo de población de las Naciones Unidas (ONU) brindando  una referencia escalofríate,  el 50% de estos habitantes  se encuentra en riesgo ante los problemas de   falta de trabajo, violencia e inseguridad,  fiel reflejo de las desigualdades de clases, género y etnia existentes en la región.


Reflexiones al paso

El régimen capitalista a través del tiempo, logra poner cada cosa en su lugar en función de defender  sus intereses, recreando las  bases de sustentación.  A pesar de no ser el centro exclusivo de expansión de impulsos, sus fuentes culturales y políticas han venido marcando las pautas  del (deber y el  ser) del conjunto de las aspiraciones humanas: propiedad privada, mercado, estado, es decir (las fuerzas invasoras legitimadas) junto a los lineamientos sobre los derechos humanos (como derechos de preservación reconocidos) aunque no siempre respetados, logrando mantener  hasta el presente una “hegemonía civilizatoria”,  en  profunda crisis.

Ante la mencionada supremacía, han aparecido en la historia y el presente  ensayos  contra hegemónicos importantes,   no carentes de debilidades – por un lado se dieron los Europeos y la posterior  caída del denominado   socialismo real - mientras en las sociedades de América Latina, surgieron  procesos populares de construcción del socialismos, otros nacionalistas y antiimperialistas, reformistas,  buscando siempre mayores grados de justicia.
En algunos países llegaron a ocupar el aparato estatal como en Guatemala “con la primavera democrática” entre los años 40 y 50 iniciando  un proceso de reforma agraria,  Chile en los años 70 con la Unión Popular, Nicaragua y la revolución Sandinista, naturalmente Cuba Socialista y en la actualidad la revolución Bolivariana en Venezuela. Por lo tanto, se trata de reivindicar el  comportamiento individual y colectivo, cuyos actos  adquirieron  sentido dentro del mundo interior  (en consonancias con los niveles de entendimientos)  de quienes, arremetieron y arremeten, sin posibilidad de logros inmediatos, hacia la construcción  de puentes  comunicantes  con el otro, en los marcos generales impuestos por el régimen.  

Las experiencias históricas se han encargado  de señalar  a los ciclos de rebeliones tendiendo a disiparse, y, a las huellas dejadas  debiendo ser rescatadas por núcleos de participantes en diferentes geografías.  Las revoluciones,  siempre han constituido un camino político (de poder) viable  a través de las vías adecuadas  a  cada realidad, dentro de lo cual,  salvo excepciones, al poco tiempo de producirse quedan atrapadas (aunque esto no sea una cuestión lineal) en las reglamentaciones  del sistema, impidiéndoles confrontar con la energía necesaria, con  el principio de desigualdad,  posibilitando la creación en su propio terreno de los nuevos gérmenes contrarrevolucionarios

Para la resolución de tal  situación no es suficiente “la política”  como la concibe la burguesía, aunque le sea lo mas útil, por ser una manera elegante de desechar el camino hacia la liberación. En las democracias formales, pequeñas elites, siempre guiaron  los destinos de los grandes colectivos, así lo demuestran  los  enfrentamiento entre grupos sociales, donde  las minorías han ejercido el poder sobre las mayorías.   La actual democracia constituida a la par del orden burgués moderno donde (Francia, Inglaterra y Estados Unidos) marcaron el rumbo, se asienta en la dominación de los grandes propietarios industriales y `por ende financieros. Si bien en algunos lugares  esas democracias representativas dan resultados, pues no se pasa hambre y los beneficios sociales, por lo general,  son altos,   su sostenimiento  implica  el mantenimiento del  80% de la población mundial   inmersa en grandes sufrimientos. Surge `por lo mismo,  la urgencia del desarrollo de otro tipo de políticas, concientes y voluntariosas, con un comportamiento superior al del capitalismo  explotador.

Es aquí donde aparece la necesidad de transformar la voluntad revolucionaria (esas nobles, buenas y humanas intenciones) en un comportamiento científico, organizado, estratégico y superior al orden  establecido, se trata de reemplazar la voluntad por la racionalidad creadora  abierta a las nuevas experiencias.  Pero incluso,  avanzando sobre la sugerencia, concibiendo  a la voluntad  como consecuencia  del nivel de conciencias alcanzado, se podría plantear el complemento de la voluntad y la racionalidad científica - quizás esa ida y vueltas,  conciencia voluntad – voluntad conciencia,  sea un lubricante  agilizador  de  cuestiones inherentes.

Considerando a la contradicción trabajo  capital,  como  la fundamental en la etapa actual,  es interesante prestar atención a  la perdida de vigencia de  actos y conceptos de izquierdas  por haber sido  superados por los acontecimientos.
Hoy  suelen  diferenciarse las  izquierdas  políticas de las sociales, manifestando cierto retraso de las primeras en relación a las segundas - expresado de otra manera, las parcialidades  políticas  han quedado retrasadas en relación las dinámicas adquiridas por los movimientos sociales. Esas izquierdas sociales fueron  en definitiva,  el factor medular del freno a la implementación del área del libre comercio de las Americas (ALCA) a partir de  coordinar  el accionar  con diferentes energías  políticas.     Semejante paso permitió la estructuración de la actual propuesta de la Alianza Bolivariana para los pueblos de nuestra América (ALBA) como un proyecto de integración “no capitalista”                                                                     

 En la marcha, las idas reformistas  dejaron    de jugar un papel de vanguardia a pesar de su buenas intenciones – las   viabilizadoras de la construcción de regimenes despóticos han sido rechazadas a partir de un hecho innegable: no hay liberación sin abrir los causes hacia una comunidad realmente libre – lo mismo ha pasado con aquellas  similares a una secta, con verdades parciales  absolutas e inamovibles, polemizando entre convencidos y al margen de los aconteceres.

 Algo de lo planteado ocurre en Sudamérica y por lo tanto en Venezuela Bolivariana,  convertida en un laboratorio popular de experiencias (resistiendo en la actualidad a la mayor operación mediática, militar, dirigida por el Pentágono apoyándose en sus lacayos autóctonos, desplegada en  su máximo `potencial) dentro de tamaña destreza   el fascismo actúa a cara descubierta, dándose a la par, un  lento pero efectivo despertar de las bases bolivarianas en defensa y profundización de sus principios.
Cabe entonces preguntarse, y,  los pares Bolivarianos sin dudas lo están haciendo ¿hasta que punto los acontecimientos cambiaron las miradas y opiniones de las izquierdas actuando naturalmente en el proceso? ¿En que dimensión la experiencia contribuyo, o no, a la disolución de los sectores citados? ¿En que grado  lograron coptarlas despojándolas de sus atributos críticos? ¿los elementos planteados conforman hechos positivos o negativos?- demasiadas preguntas ¿no? (quizás puedan ser formuladas de manera mas  inteligentemente en función de aportar de mejor manera) pero una cosa es clara,  no se pueden responder con consignas, ni paciones descontroladas, ni recurriendo únicamente a la situación vivida antes de la revolución Bolivariana, ni  sacando a relucir el metro para ver  quien es mas revolucionario, requiere de algo mas,  relacionado  (entre otros elementos) con el debate  sobre los  caminos  para avanzar, superando los problemas sociales,  mas concretamente el de los sectores obreros y populares de la urbanidad y el campo  sin perspectivas  de solución en los marcos del régimen capitalista.

 Posiblemente parte de las  izquierdas pudieron haber  sido empujadas hacia su disolución  (haberlo logrado o no es otra cosa)  los lineamientos en este sentido se componen  por una complejidad de aristas no siempre apareciendo de modo nítido – quizás sea comprobable la perdida de vigencia de algunos  planteos,  suplantados por otros,  en medio de un proceso dialéctico de muerte de lo viejo y nacimiento de lo nuevo - o  tal vez, lo viejo y lo nuevo siguen conviviendo,  buscando   avanzar  dentro de la diversidad  hacia la concreción de la  revolución capaz de  afectar la propiedad privada transnacional asociada a actores locales, junto a la profundización de las iniciativas de nuevos gobiernos de las comunas.

Una mirada mas abarctiva permite identificar a las   autodenominadas izquierdas políticas, teniendo  en sus manos el aparato estatal  en diferentes países,  como,  Brasil, Chile, Uruguay, El Salvador y algunos plantean Argentina, mostrándose mas preocupados por pagar las deudas externas, mantener las buenas relaciones con el imperio beneficiándolo,  ocupar espacios en los medios de comunicación,  participar en las  actividades de la farándula,  que,  en las resoluciones de las cuestiones estructurales básicas. Tal posición las ubica, de una u otra manera, fuera de la preocupación    principal  de Washington, aunque les sean molestas.  Para el imperio  las principales inquietudes  siguen siendo los movimientos populares y la  posibilidad de una verdadera integración Latinoamericana Caribeña basada en la justicia y la solidaridad entre los pueblos.

Sin dudas se da una alianza Izquierdista Populista en gran parte de América del Sur, esas  nuevas  izquierdas,  no hablan de confiscaciones,  reformas agrarias, ni de la creación de nuevos  poderes populares, haciéndolas tolerables  para el imperio,  por expresar en la practica,  la inviabilidad de  los procesos socialistas,  generando en su lugar, lineamientos   a través de  nuevos funcionarios – as,  concibiendo  la política,  solo como el arte de lo posible (sin tocar los intereses económicos concentrados)  con lo cual e independientemente de las palabras,  ratifican  las ideas del fin de la historia, aunque en una primer mirada   no sea posible dilucidarlo.
Las  Izquierdas  sociales (movimientos indígenas, campesinos sin tierras, desocupados, insurgentes no dispuestos a renegar de sus ideales, jóvenes y mujeres participando en ellos, el movimiento obrero organizado esgrimiendo su dignidad,  las instituciones progresistas en condiciones de participar en una propuesta articulada y regional de Patria Grande)  constituyen la verdadera   amenaza para el imperio.

 Pero estas opiniones serian cómodas,  quedarían truncas e incluso invalidadas sin no se planteara  la urgencia de tener presente la potenciación de una izquierda revolucionaria, preparándose y presentándose como tal, asumiendo su condición de dirigente,  elevando al máximo la  capacidad  comunicante  dentro de un mundo no propenso a oírla.
Si bien hay diferentes experiencias de construcción,  se debiera  tener mas en cuenta  su fortalecimiento  a partir de las nuevas generaciones  abrazando tales ideales,  sin desmerecer los aportes de aquellos  pertenecientes a parcialidades de izquierdas generando políticas superadoras o no generándolas,  poseedores de una mente critica, probados   en teoría y practica (incluso con errores, depende de quien y como se lo mire) en  su apego a la causa de la liberación y la construcción de un mundo nuevo.

Lo planteado con  márgenes de errores a dilucidar  por ser un  tema en  debate, no excluye  la significación  de extraer de la rabia generada por la propiedad privada  algunos elementos positivos, con el fortalecimiento  un espacio estratégico, organizado, donde cada militante y participante, no solo, asuma las luchas  con los grados de disciplinas y trasparencias necesarios,  sino que, además  sean capases de orientar  las  actividades  con los niveles de ofensivas requeridos. Implica a la vez, definiciones elementales como:  defender  los  intereses  obreros,  populares,  de la urbanidad y el campo,  es decir los propios -  o aquellos  de quienes dicen defenderlos,   esto es central  a fin de  no perderse en la maraña de los lineamientos  orientados  por el capitalismo,  en oportunidades aceptados  por  las llamadas “izquierdas”


Desechar prácticas nocivas

 Por estos lares, en ese ir y venir de los esfuerzos hechos hacia la liberación, dentro de un sin números de aciertos, aparecen  situaciones vinculadas  con posiciones y actitudes tomadas ante distintos hechos  no siempre resueltos de la mejor manera.
Seria bueno por lo tanto,  seguir explorando los caminos conducentes a la profundización de los  contenidos  de las diversas opiniones, sin destruir a  un  par   por no concordar parcial o totalmente con ellas. La exposición de diferentes  ideas lógicas  es algo  legítimo  en el contexto de la confrontación ideológica existente, sin embargo,  cuando rebasan los escenarios políticos ideológicos, utilizando cualquier argumentación veraz o no en función de destruir, se esta   frente a algo diferente a la confrontación de ideas,  y, ante la potenciación de  una arcaica pero eficaz forma de desarticular lo laboriosamente articulado,  disminuyendo al unísono,  las posibilidades de superación de diversas taras como,  la existencia  de una complejidad mayor a la propia dificultad natural en el cumplimiento de  las responsabilidades. Cuestiones indicadoras de lo perentorio de  seguir aprendiendo a batallar en frentes distintos, realidades diferentes y planteos disímiles de modo simultáneo.

Considerarse el ombligo del mundo pareciera ser una tendencia en avance, contribuyendo decididamente al debate de cuestiones no fundamentales, por lo mismo,  ir saliendo de esa forma de pensar y actuar requiere  mayores   esfuerzos   en función de enriquecer los contenidos de los colectivos, lo cual obliga a reforzar  lo teórico.

Ahora bien, cuando se habla de la necesidad de  estudiar, leer,  estar informados, siempre aparece  la cuestión del tiempo, en los marcos de  resoluciones básicas como, la obtención del sustento diario,  junto a un cúmulo de actividades surgidas de los compromisos contraídos con sectores sociales en las  protestas. Esta circunstancia requiere   la evaluación  de  criterios desentonando con la vida,  desechando en principio, la existencia  de alguna ley universal fundamentando -  a mas tiempo dedicado a las actividades, mayores son los resultados - un ejemplo es el tiempo destinado en nuestro país  por los diferentes destacamentos  en pos de la revolución,  a pesar de ello, aun no se ha  logrado  viabilizar las medidas para concretarla - se trata entonces de optimizar.

En la misma línea reflexiva se observa la no superación de ciertas intenciones de seguir viviendo  de lo que  se fue en el pasado, constituyendo un acto limitado, no acorde a los momentos  e impeditivo de la motorización de iniciativas en el presente. Esos honores ganados en las luchas,  se debieran  revalidar día a día, la dinámica de los acontecimientos así  lo exige. Bien por todo lo hecho, pero cuenta lo por hacer.

Otro de los fenómenos, es la aparición de una dualidad de opiniones en el fondo contrapuestas. Sondeando en la particularidad, surge  un denominador común: los acuerdos individuales con organizaciones o personas defensoras del actual estado de cosas, esgrimiendo un discurso  camuflado, en base al cual,  algunos actores son tentados, no siempre por el vil metal, sino a través de las posibilidades de lograr un reconocimiento social mas amplio,  dinamizando así,  una serie de situaciones en lo aparente confusas, pero con una claridad de objetivos fríamente calculados.
No es casual la persistencia del fenómeno, porque a pesar de los esfuerzos para ser mas habitables las organizaciones,  alegres,  llenas de vida, en ciertos  niveles  las actividades  se asemejan a los grises, sin actos relucientes, sin reconocimientos  trasuntado  (por falencias propias)   en un cierto cansancio, agotamiento,  situación aprovechada inteligentemente por los portadores de la ideología burguesa en todas sus variantes para  mellar algunas conciencias.
Por ello,  seria propicio prestarle  atención a un hecho no siempre comprendido en toda su complejidad y dimensión “las propuestas hechas a los militantes,  de  alcanzar    un reconocimiento social más amplio”. Pareciera una tontería ¿no? sin embargo,  es una idea conjugada con las aspiraciones mas elementales de los seres humanos, de ahí su efectividad, el interrogante es,  como  hacer para encausar tal aspiración en  favor de los intereses colectivos del pueblo.

 Las presentes  opiniones  son brindadas  desde el llano, lugar donde las ideas en ocasiones son aceptadas y en otras generadas.  Siempre ronda la incertidumbre a cerca de lo acertado o no de expresar  pareceres pocos  gratos, a pesar de ello,  se impuso  la convicción de hacerlo en función de seguir abriendo puertas al debate, pudiendo  ser aceptadas o no (no es lo fundamental) si en cambio enriquecerlas,  desecharlas, cambiarlas de modo colectivo, como una forma de profundizar la búsqueda de un futuro luminoso para las grandes mayorías. Tal vez sea el momento de pisar por unos segundos la pelota, pensar, buscando el tiempo indispensable para  el cambio de aire, en función lograr las certezas requeridas.


Hechos a seguir denunciando

 Como por arte de magia, funcionarios gubernamentales  descubren a seres reducidos a la servidumbre, en las estancias de la familia Etchevehere,  (Provincia de Entre Ríos). El titular del registro de trabajadores y empleados agrarios (RENATEA) Guillermo Martín, señalo la existencia de peones de mas de 50 años, sin saber leer ni escribir, no registrados, viviendo en unidades sin luz eléctrica, agua potable y baños, sin acceso a los recibos de sueldos y percibiendo como peones generales la suma de $450 por mes.
No es una situación nueva en la Provincia ni en el país, reproduciéndose gracias a las complicidades de los gobiernos de turno y el sindicato (UATRE) Unión de trabajadores rurales y estibadores.
Luis Etchevehere presidente de la Sociedad  Rural Argentina (SRA) se muestra como defensor de la democracia y el libre mercado. La mascara democrática de pronto  se le cayo, sus planteos son   una “gran mentira” teniendo  en cuenta las  acciones  de reducción  a la servidumbre  en los campos familiares.

Otro elemento nefasto (que retrotrae a épocas en lo aparente superadas) es el control y seguimiento de diferentes fuerzas de seguridad, haciendo  espionaje interno, contra ciudadanos y militantes populares.
Por un lado, un grupo de abogados de la ciudad de Paraná,   integrantes del instituto de derecho penal, procesal y criminología del colegio de abogados de Entre Ríos, envió una nota al Poder Ejecutivo Provincial, expresándole su preocupación por las espías ilegales, los actos de escuchas telefónicas para controlar  abogados, agraviando el ejercicio de la profesión, al derecho constitucional de defensa y al pueblo todo.

Por otro - la situación se  traslada a los movimientos  y militantes populares,  con la cobertura de la lucha antidroga, constituyendo  lineamientos similares a los  potenciados   en los años 70, renovados en el presente, orientado a diezmar  a las fuerzas  dispuestas a lograr un mundo mas igualitario.

Se da  toda una  intencionalidad de “confundir”  las actitudes militantes  con los traficantes de drogas en cada lugar, dejando un claro  mensaje,  estamos tras de ustedes. Una cosa son los integrantes  de las diferentes parcialidades  sociales cumpliendo funciones  solidarias,  sin recibir nada a cambio y su disposición a participar en todo lo relacionado a las conquistas  de mejoras elementales  hacia  una vida mas digna, y otra,  son los traficantes  junto a  sus socios dentro y fuera de  los  estamentos del poder.

En  ese  marco general,  por abajo,  se desarrollan  iniciativas  colectivas   tendientes a  la creación de anticuerpos sociales,  para evitar   por ejemplo que,  un ratero le arrebate el bolso a una jubilada saliendo del supermercado y le quiebre una costilla o le disloque un hombro. Con el mismo criterio,  esta presente la preocupación orientada a ponerle freno a los asesinos seriales  traficantes de drogas, captando jóvenes  para su consumo y venta, actuando  a plena luz del día o en las sombras.  

 Se repite una  operatoria,   entre los compañeros de trabajo, vecinos y familiares de los militantes, al  acusarlos   de  traficantes.  Si bien,  lo burdo de las mentiras  las hace no creíbles,  logran avanzar en sus objetivos de crear miedos  y generar cierta parálisis en la luchas por la defensa de los derechos naturales, sin dudas,  el objetivo es  acumular datos personales,  producir miedos y reprimir con la excusa de la droga.
 A nadie se les  escapan los hechos represivos como los recientes en la Provincia  del Chaco, la aprobación de la ley de seguridad y  la existencia del denominado proyecto X
Los impulsores de los delitos de lesa humanidad  militares y civiles se muestran activos, aun se creen referentes, utilizando  en el cumplimento de  sus cometidos a los vivillos de turno creyéndose  importantes.

Ladran Sancho, pero se trata de  impedir  las mordeduras, porque están rabiosos y la rabia si no se la  trata mata.  Evitarlas implica   el repudio público y unificado  de estos tipos de actos,  dejándolos en evidencia, sacándoles  las mascaras detrás de la cuales se esconden  asesinos potenciados, actuando en nombre de la democracia,  que el pueblo (no ellos) y a pesar de ellos, supo  conseguir. Las denuncias debieran ser acompañadas con  las entrevistas a las autoridades pertinentes  a fin de plantearles los  hechos  y escuchar su posición, aunque lo central sea el trabajo en los colectivos de bases.

Notas: 

1- el núcleo duro     --   Marcelo Justo – 12/ 12/ 2013.

2- aumenta la  capacidad operacional de Estados Unidos en A. Latina y el Caribe  -- Abel Gonzáles  Santamaría –    rebelión.

Juan Alberto Remedi  -- Integrante del Movimiento Bolivariano de Entre Ríos.
                                                                                                   
                                                                                                   Paraná: junio de 2014.
www.remedijuanalberto@ blogspot.com.



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